La espera ha sido larga, pero al final el Fútbol Club Cartagena incorporará hoy a su plantilla a un ‘9’, un jugador que se convierta en la referencia ofensiva de la plantilla de Julio César Ribas. Pablo Pallarés Marzo (Gandía, 12 de enero de 1987) ha sido el elegido. En realidad, hace ya muchas semanas que el club albinegro tenía claro que debía de ser ese delantero centro que llegara para hacer olvidar a futbolistas como Florian y Fernando, los dos últimos goleadores cartageneristas.
Pablo Pallarés llega esta mañana a la ciudad, pasará reconocimiento médico, firmará su contrato y se pondrá rápidamente a las órdenes del manager general, ya que el inicio de la Liga está ya a la vuelta de la esquina con el partido de este sábado en el estadio Cartagonova frente al Marbella (20.30 horas). Pero el exfutbolista de La Hoya Lorca, conjunto con el que marcó 16 tantos el curso pasado, no será el último en reforzar la plantilla. El Cartagena sigue a la espera de contratar otro delantero, en este caso de diferentes características a las del valenciano, un jugador que llega en plena madurez deportiva depués de pasarse muchos años cambiando de equipo de forma constante.
Pallarés es un delantero centro a la antigua, que ha aprendido a sacar rendimiento a su gran envergadura (1,88 metros), capaz de hacer año en las defensas rivales, que encuentran muchos problemas para defender en los balones aéreos a un jugador de estas características. Con dos extremos capaces de nutrirle de buenos balones, el gandiense asegura una buena suma de tantos por temporada. Es un rematador, que a veces da la apariencia de ser tosco, pero no un jugador capaz de generar jugadas que desequilibren a las zagas.
La campaña pasada, en La Hoya Lorca, donde tenía un contrato que rondaba los 1.200 euros mensuales, se tuvo que ganar el puesto como delantero centro titular. Los primeros encuentros los vio desde el banquillo, ya que José Miguel Campos optó por el yeclano Ortuño. Pero el desliz que sufrió el ahora jugador del Granada en un partido, que le costó una sanción de cinco encuentros, le abrió las puertas a Pallarés. Su primer partido de liga con la elástica del ‘brócoli mecánico’ fue en la tercera jornada, donde entró 12 minutos en el campo en el triunfo de los lorquinistas en el Cartagonova. Hasta la jornada octava, ante el Algeciras, no sumó su primer tanto, y pese a que entró en los siguientes choques en el campo en los últimos minutos, en la decimoquinta jornada ya sumaba cinco tantos. Después llegó la sanción de Ortuño y Pallarés no desaprovechó la oportunidad, asentándose ya como titular indiscutible. Y cuando en el mercado de invierno Ortuño se marchó al Girona, se quedó como máxima referencia ofensiva.
Pallarés, quien se formó en la cantera del Valencia, ha tenido que recorrer un largo camino hasta alcanzar la madurez deportiva. En 2005 abandonó las escalas inferiores del club ché para enrolarse en el Atlético de Madrid, de donde salió en 2007. Desde entonces, en solo siete temporadas, ha jugado en nueve equipos diferentes. Pasó por el Palencia, Denia, Águilas y Alcoyano antes de llegar al Roquetas, en la 2010-2011, donde estableció su mejor marca goleadora en una campaña, con 9 tantos. El Almería se fijó en el gandiense y lo incorporó a su filial, aunque terminó el curso en Segunda con el primer equipo, con el disputó once encuentros, en los que no llegó a ver puerta.
Pallarés decidió cambiar una vez más de aires. Recaló en el San Fernando (temporada 2012-2013), donde no tuvo una experiencia positiva y solo jugó 21 encuentros como titular, en los que anotó 2 tantos.
Un verano con muchas ofertas
El pasado verano se encontró con varias ofertas, pero ninguna de ellas importante. Por ello esperó hasta el final del verano para aceptar el ofrecimiento de La Hoya Lorca, el equipo donde se ha relanzado la carrera deportiva de un jugador que fue el máximo goleador en todos los equipos por los que pasó en la cantera del Valencia y que fue internacional sub-17.
No le han faltado ofrecimientos en los dos últimos meses al jugador de Gandía, pero como ya es habitual en él, ha preferido esperar hasta el último momento para decantarse por una oferta. Incluso ha tenido oportunidades de jugar en Segunda División debido al interés que mostró el Alcorcón, pero el Cartagena estuvo rápido y hace un mes firmó un preacuerdo con Pablo Pallarés. Tras el mismo, decidió marcharse a Austria para probar suerte en un equipo de Primera División, pero al final ha optado por regresar a la Región, donde también vistió en la temporada 2009-2010 la camiseta del Águilas. Durante este período, el delantero centro ha manejado también otras ofertas importantes, como la que le hizo el Huesca de Luis García Tevenet, que estaba dispuesto a mejorar el acuerdo que tenía con el Cartagena. Pero Pallarés ha respetado el compromiso adquirido con la entidad que preside Javier Marco y hoy ya estará a las órdenes de Ribas.
Su fichaje no será el último, puesto que la dirección deportiva del club está buscando otro delantero, aunque de diferentes características. La incorporación de otro futbolista podría retrasarse hasta la última semana de agosto, que será cuando se cierre el mercado.